Hola a todas y todos. Pasen a leer porque tenemos mucho qué hablar sobre ser mujer, liderar las empresas, enfrentar los retos que se ponen en el camino y ser protagonistas de nuestra vida.

Hablemos de Isabel y Chava Iglesias

¿Han visto la serie Club de Cuervos?

Si no la has visto, neta hazlo. Esta serie refleja la historia de Isabel, una mujer apasionada por los deportes. Le gusta mucho estudiar sobre el mundo futbolero, se la pasa en cursos, capacitaciones y demás.

Su sueño es ser la Presidenta de “Los Cuervos Fútbol Club SA. de C.V” pero su familia no está de acuerdo con esa idea. 

Por el contrario, a su hermanastro Chava no le gusta tanto el fútbol, le encanta la fiesta (cosa que no tiene nada de malo) pero verdaderamente no le importa prepararse para ocupar el puesto de “presidente”.

La gran diferencia es que toda la familia está de acuerdo en heredar ese puesto a Chava Iglesias, por el simple hecho de que él es hombre. Y “según ellos”, el fútbol es para hombres.

Pero no sé preocupen. Esta no es la clásica historia de la “mujer víctima de los hombres, reprimida y silenciada por el sistema”. Todo lo contrario. 

Isabel Iglesias pelea por el puesto, demuestra que está preparadísima para enfrentar cualquier reto. Los Cuervos bajaron a segunda división, se quedaron sin dinero y patrocinadores, entre muchas cosas más; pero Isabel sacó a flote al equipo (a pesar de que su familia no confiaba en ella).

Al final Chava Iglesias se da cuenta que el fútbol no es su más grande pasión, así que se va a Nueva York para estudiar moda y se convierte en diseñador.

¿Qué tenemos que aprender de esta historia?

Que el rol de las mujeres en las empresas está cambiando y que no importa el ramo en el que nos encontremos, podemos ser lo que nosotras queramos.

Las mujeres podemos ser futbolistas, directoras técnicas, árbitras, astronautas, ingenieras, mecánicas, conductoras de Uber, juezas, arquitectas, científicas y cualquier otro puesto que elijamos.

Afortunadamente, los tiempos han cambiado y nuestras familias y empresas están agarrando la onda PERO ni el camino está tan parejo ni el panorama tan alentador. Aún hay mucho por aprender.

Checa estos datos: 

1- Aquí te dejamos algunos datos a cuestionar. Aunque las trabajadoras representan el 35% del total de empleados en las empresas que cotizan en la bolsa, solo el 1% (dos mujeres) dirigen una empresa.

2- Sólo el 15% de los cargos equivalentes a vicepresidencias o direcciones son ocupados por mujeres 

3- Dentro de las empresas mexicanas, la proporción de las mujeres disminuye a medida que aumenta la jerarquía de los puestos de trabajo.

4- Un estudio realizado por “Mujeres en los Consejos de Administración” de Deloitte (empresa experta en asesoría de corporativos), el 84% de los cargos de dirección son ocupados por hombres y solo el 16% por mujeres.

Las mujeres vemos otras cosas que tú no ves

Hablemos de Bumble, la app líder en citas.

Bumble fue fundado por una mujer que sabía que a las mujeres no nos da tanta confianza que un hombre random nos busque de la nada en una app de citas, la mayoría prefiere tener la posibilidad de elegir con quién hablar. Entonces fue así que implementó una app enfocada en las necesidades de una mujer.

Hoy Bumble es una de las apps de citas más exitosas en México y Latinoamérica.

Económicamente te conviene incluir a mujeres en tus juntas de negocio y tus puestos de trabajo.

De empleada a CEO

¿Por qué las mujeres seguimos luchando por la igualdad de género y nuestros derechos si hace años que ya podemos votar, estudiar una carrera universitaria o trabajar, entre otras cosas?

Porque que algunas podamos hacerlo… ¡no significa que todas puedan! Además, todavía existen muchas áreas de oportunidad para lograr que las mujeres tengamos las mismas oportunidades y derechos que los hombres.

Aquí algunos consejos:

Contrata mujeres

Considera sus talentos y promuévelas

Págales por su trabajo

Apoya sus luchas sociales

No opines si no conoces del tema

Defiende sus derechos 

Abre espacios para ellas

Lucha contra la inequidad

Lucha contra el sesgo de género

Mujer, tú que nos lees. Jamás dudes de tu grandeza y ve por eso que tanto deseas.