Pink Tax: un engaño de género
Seguramente has escuchado del Pink Tax (en español, Impuesto Rosa). Últimamente, las redes sociales lo han traído a colación mediante videos y posts informativos que han llamado la atención de personas en todo el mundo. Según estudios de Estados Unidos, este “impuesto” es un aumento de precio que se le agrega a los productos dirigidos especialmente a las mujeres.
En resumen: las mujeres pagan más que los hombres por estos artículos y no es por gravamen, sino por un sobreprecio que viene directamente del fabricante al mercadearlos como algo único y especial para mujeres.
¿De dónde viene el Impuesto Rosa (Pink Tax)?
Este no es un concepto nuevo. Un estudio en California realizado en 1995, comprobó que en el transcurso de un año, las mujeres pagan $1,300 dólares más al año en comparación que los hombres por los mismos productos. Esto significa que centavo a centavo, la acumulación en el mercado masivo, hacen estas alarmantes diferencias y con el tiempo se ha ido agravando.
Esto aplica para mujeres adultas y también para niñas.
¿Qué tan grande es la desigualdad de ingresos por género?
Desde cobrar de más por bolígrafos rosas hasta por toallas sanitarias, este impuesto rosa ha despertado controversia en el mundo, por lo que implica. Aunque todavía falten estudios explícitamente al respecto en México, es un problema global y con la brecha salarial en el país donde hay 26 por ciento de mujeres entre 16 y 29 años que no están en trabajos remunerados y hacen 77 por ciento del trabajo no remunerado en el hogar, es un problema todavía más serio.
Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, la brecha salarial en México es de un 30% aproximadamente, siendo Nuevo León el estado con mayor diferencia con un 39%.
Industrias de emprendimiento de las mujeres mexicanas
Además, de acuerdo al estudio “Hear Her Voice”, el problema también tiene que ver con que la mayoría de los negocios emprendidos por mujeres están enfocados en industrias que no requieren tanto riesgo ni tecnología como en las industrias en las que emprenden mayoritariamente los hombres, lo cual se traduce en menos ganancias. Según este estudio, las mujeres en México emprenden en las siguientes áreas: - 42% en ropa y accesorios - 38% en la industria de la cosmética y cuidado personal - 14% en alimentos y bebidas - 10% en madres y bebés - 9% en regalos y flores - 9% en tecnología Por eso hay tanta relevancia en pedir investigación y atención de parte de las autoridades correspondientes, aunque más importante es estar conscientes de que este fenómeno existe no solo aquí, sino en todo el mundo.
Tal vez, mientras más personas estén informadas del tema, sea más probable que un cambio esté tocando nuestras puertas.